Un grupo de científicos de la Universidad de Guanajuato (UG) trabaja en el análisis de compuestos químicos de 15 especies de plantas endémicas de México, a fin de desarrollar medicamentos herbolarios para el tratamiento de la obesidad.
Los miembros del cuerpo académico de Farmacia y Química Clínica de la UG, identificaron 139 especies de plantas, de las cuales seleccionaron las que hasta ahora no habían sido estudiadas para estos fines.
Entre las elegidas por los investigadores para su análisis farmacológico, fitoquímico y toxicológico destacan variedades de nopal como el blanco, de cochinilla y xoconoxtle, así como amaranto, guanábana y hierba del sapo, entre otras.
“El xoconoxtle crece en zonas áridas en la región centro y norte del país. Del nopal blanco, no se conocen con exactitud los componentes de esta planta, pero se han usado para el tratamiento de diabetes”, explicó el líder del proyecto, Ángel Josabad Alonso Castro.
En entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el doctor en ciencias bioquímicas agregó que en sus estudios de maestría observó que el consumo de nopal ayuda a disminuir los niveles de azúcar en la sangre e incluso triglicéridos.
“Sobre la hierba del sapo no hay muchos estudios. Esto nos llama la atención porque son plantas que no se han aprovechado en la investigación”, abundó.
En la actualidad, los especialistas realizan estudios in vitro con células adiposas de ratón, para observar si los extractos de las plantas seleccionadas reducen el número de dichas células encargadas de almacenar lípidos o grasas en el organismo.
“Vamos a identificar químicamente el extracto, metabolitos y componentes principales y saber si algunos de estos componentes ya se han descrito, de no ser así, podemos partir de aquí y aislar y purificar el compuesto”, apuntó.
“Una vez que identifiquemos los extractos que disminuyen el mayor número de células de grasa, realizaremos estudios en ratones obesos”, detalló.
Alonso Castro refirió que el objetivo de la investigación es desarrollar fármacos que favorezcan la salud de los pacientes con obesidad, que actúen de forma directa sobre la grasa.
Resaltó que una vez finalizada la fase preclínica, buscarán probar el efecto de las plantas en pacientes.
